lunes, 7 de septiembre de 2015

Palomitas de Maíz con Durazno y Pasas




La mayoría de los años, disfruto estar con mis hijos en el verano. Tenemos una combinación de días de campamento, días de juego, tiempo libre, salidas, vacaciones y días de relajación a la vieja escuela. Aun mejor, realmente disfruto pasar tiempo con cada uno de ellos. Son muy divertidos.

Este verano, sin embargo, no se disfrutó mucho puesto que nuestro equilibrio de tiempo libre y  bien estructurado se salió de control. Mi esposo y mi hijo, el mediano, se iban al campo de béisbol casi todas las noches; mi hija la mayor cuando no estaba de niñera estaba ensayando para un espectáculo; y mi más pequeño estaba con dos  lesiones menores que lo dejaron fuera del campamento y de la gimnasia. Nuestros horarios dieron un giro. Yo estaba luchando por tener un poco de tiempo con mi hija, y me encontré bastantes horas en el cuarto de lavado, lavando manchas de los uniformes después de un juego.


Pensándolo bien, no es una gran cosa. Sé que las cosas pueden ser mucho peor, pero un horario volteado es lo que mi hijo de 15 años llama un problema importante. Sin embargo, para mediados de agosto, necesitábamos ya una organización. Después de todo, ¿Cuántas noches pueden quedarse mis hijos despiertos viendo películas de tiburones? Ya era hora de regresar a la escuela.
Pues aquí estamos. Denme un mes o algo así, y ya voy a estar extrañándolos, pero nos va mucho mejor con una rutina regular. Con todo el mundo asistiendo a la misma escuela este año, nuestras transiciones han sido bastante predecibles. Lo cual significa que estoy volviendo a mi “programación regular” de madrugar, una clase rápida en el gimnasio, los niños a la escuela después de una mañana de trabajo.

Pero primero, un poco de tiempo para mamá. Mis amigas Melisa y Paola hacen un trabajo espectacular al organizar café para las mujeres del vecindario. Esta tradición podrá verse un poco anticuada pero yo la aprecio mucho, especialmente cuando es tiempo de regresar a la escuela. Incluso cuando muchas de nosotras que trabajamos todo el tiempo, intentamos estar presentes, porque nos da la oportunidad de ponernos al día unas con otras a pesar de nuestras vidas ocupadas y las agendas de nuestros hijos. Es genial ver a mis amigas del vecindario de nuevo, muchas de las cuales solo eh visto en las redes sociales durante el verano.

Siempre hay cosas deliciosas para almorzar… quiche, sándwiches, fruta y usualmente hay una cazuela con desayuno. Yo me estaré agregando al festín con una botana de palomitas con durazno. Preparado con maíz palomero y yogurt bajo en grasa, esto es una muy buena adición a la mesa del almuerzo. SOLO PARA MAMÁS.

Escribe: ¿Cuál es tu tradición favorita para el regreso a clases? Y ¿Eres tú, de las mamás que festeja el regreso a clases o quisieras que el verano jamás terminara?

Palomitas de maíz con Durazno

Ingredientes

• 10 tazas de maíz palomero reventado
• 1/2 taza de arándanos secos
• 1 taza de yogurt bajo en grasa sabor durazno
• 1/2 taza de azúcar
• 1/2 taza de azúcar morena
• 1/3 taza de jarabe de maíz

Preparación
1. Deja maíz palomero reventado y los arándanos secos en un bol grande y mantenlo tibio.
2. Combina el yogurt, el azúcar y el jarabe de maíz en una cacerola de aproximadamente 10 tazas; cocina a fuego medio, agitando constantemente hasta que se forme jarabe espeso, hilos un poco viscosos que goteen de la cuchara.
3. Vierte sobre el maíz palomero, revolviendo para cubrir y Servir.



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